Aunque pasé la mayor parte de mi vida en Polonia, desde que puse un pie en suelo holandés, me he sentido muy bien aquí. Holanda es un lugar donde la tradición se encuentra con la modernidad, creando un espacio armonioso para la vida diaria.
El idioma holandés? Bueno, admito que no soy experto en él. Afortunadamente, la sonrisa es universal. En los Países Bajos, mi vida está llena de aventuras, y cada día es una nueva oportunidad para descubrir algo fascinante. Mi vida está llena de nuevos desafíos, pero también es rica en diversidad cultural, lo que hace que la rutina sea emocionante y interesante.
Los Países Bajos son para mí un lugar donde me siento libre e inspirado. La gente es abierta, amable y tolerante. Su enfoque amigable hacia la vida hace que me sienta como en casa incluso siendo extranjero.
Por educación soy economista, pero encuentro mi verdadera pasión en el arte de descubrir el mundo, ¡literal y metafóricamente! Después de años de números y gráficos, decidí seguir mi corazón, que me llevó a pintar los colores de la vida y a fotografiar momentos que dan forma a nuestra realidad. Economista que pasó años analizando tendencias de mercado, ahora analiza el mundo a través del objetivo, buscando inspiración en nuevos horizontes. ¿Y por qué Holanda? Sinceramente, amo la atmósfera de apertura y diversidad cultural que caracteriza a este lugar mágico. Como todo polaco, tengo un poco de obstinación, un toque de locura y una gran carga de creatividad. Les invito a descubrir mi mundo del arte, donde cada cuadro y fotografía es un pedazo de mi alma polaca.
Viviendo en Limburgo, entre las encantadoras ciudades de Maastricht y Heerlen, descubro el encanto único de esta región cada día. Es un lugar donde la naturaleza se entrelaza con la historia, creando paisajes pintorescos y una atmósfera excepcional. Paseando por las pintorescas calles de mi amada Maastricht, me siento como si viajara en el tiempo, pasando por edificios históricos y disfrutando de la belleza que me rodea. Las verdes colinas invitan a caminatas, y la belleza de los paisajes circundantes me inspira constantemente. Limburgo no es solo un lugar de residencia, es un oasis de paz e inspiración que me permite encontrar alegría en las experiencias diarias en este rincón mágico del mundo.
ÚLTIMAS OBRAS
Como economista con pasión por la pintura y la fotografía, mi enfoque hacia el arte es único. Veo mis cuadros y fotografías como expresiones de mi interpretación personal del mundo, donde formas y colores reflejan diversos aspectos de la vida. Experimento con diversas técnicas artísticas, fusionándolas con mis propias experiencias y observaciones. Mis obras a menudo contienen alusiones sutiles a las experiencias y emociones cotidianas, lo que hace que los espectadores comiencen a reflexionar sobre la diversidad de interpretaciones del arte. Esto me permite ver el mundo a través del prisma de la imaginación y la creatividad, al mismo tiempo que me expreso a mí mismo a través del arte de manera original y personal.
La obra de Amedeo Modigliani y la obra de Peter Lindbergh me fascinan por razones completamente diferentes. Ambos artistas influyen en mi visión del mundo del arte y moldean mi sensibilidad de manera completamente diferente. Modigliani siempre ha sido para mí un símbolo de elegancia y melancolía, y sus obras emanan una calma misteriosa. Me fascina cómo pudo transformar la forma humana en algo tan abstracto y personal al mismo tiempo. Lindbergh, como maestro de la fotografía, me impresiona con su habilidad para capturar la autenticidad y la belleza natural de las personas. Sus fotografías son como verdaderas obras de arte que cuentan historias y emociones. Admiro cómo pudo resaltar el carácter y la individualidad de sus modelos, mostrando que la verdadera belleza reside en su autenticidad. Para mí, ambos artistas no solo son íconos en sus campos, sino que también me obligan a buscar significados más profundos y simbolismos en el arte.
DIGITALICE SUS RECUERDOS
Además de la fotografía y la pintura, mi corazón late también por otras pasiones. Amo caminar por las montañas y descubrir los secretos del mar mientras navego. ¿Por qué? Porque en estos momentos experimento una extraordinaria armonía con la naturaleza, donde cada paso en las montañas es como un viaje al interior de mi propia alma, y cada maniobra de navegación se convierte en una metáfora del curso de la vida. Las montañas y el mar no son solo un espacio para explorar para mí, sino también una fuente de inspiración y reflexión. En su presencia, experimento la claridad de la mente, donde todas las preocupaciones desaparecen, dejando espacio para la paz y el equilibrio interior.
En mis planes para el futuro, la mayor importancia radica en la armonía entre la salud, la familia, los amigos y un poco de sueños que dan color a la vida. Sueño con una pequeña casa blanca en la orilla del Mar Mediterráneo, que se presenta como un símbolo de paz y bienestar, donde la vida cotidiana se entrelaza con vistas impresionantes y los sonidos de la naturaleza. Por supuesto, además de eso, no puedo negarme un poco de locura. Sueño con comprar un yate y dar la vuelta al mundo con mis amigos más cercanos. Sería no solo una gran aventura, sino también una forma única de fortalecer lazos, construir confianza y crear momentos inolvidables que siempre recordaremos con una sonrisa en el rostro. Y quién sabe, ¡quizás esta pequeña casa blanca junto al Mar Mediterráneo se convierta en nuestra base para futuras aventuras marinas!
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2024 Mariusz Poskart